18 Julio: Desaprender
18 Julio: Desaprender
“Para alcanzar el conocimiento, añade cosas cada día. Para alcanzar la sabiduría, elimina cosas cada día.” — Lao-Tse
Fuente/Tradición: Taoísmo / Jeet Kune Do
La Historia: La Taza de Té
Era la era Meiji en Japón. Un profesor universitario occidental, muy erudito, vestido con un traje impecable y orgulloso de sus títulos académicos, viajó para visitar a un famoso maestro Zen llamado Nan-in. El profesor quería saber qué era el Zen. Pero en realidad, no quería escuchar. Quería demostrar lo que él ya sabía. Quería validar su propio intelecto. Desde el momento en que entró en la pequeña cabaña del maestro, el profesor no paró de hablar. Habló de filosofía comparada, de la historia del budismo, de la física cuántica, de sus propias teorías sobre la conciencia. Nan-in escuchaba en silencio, con una leve sonrisa, mientras preparaba el té. —”¿Le apetece un té?” —preguntó el maestro suavemente. El profesor asintió, pero siguió hablando sin respirar. Nan-in empezó a verter el té caliente en la taza del visitante. La taza se llenó hasta el borde. Pero Nan-in no paró. Siguió vertiendo. El té se desbordó por el borde de la taza. Cayó al plato. Empezó a derramarse sobre la mesa de madera pulida. Cayó sobre los pantalones caros del profesor. El profesor, al sentir el calor en las piernas, saltó de la silla y gritó: —”¡Basta! ¡Está loca! ¡La taza está llena! ¡No cabe más!”. Nan-in dejó la tetera con calma, le miró a los ojos con una profundidad infinita y dijo: —”Como esta taza, usted está lleno de sus propias opiniones y especulaciones. ¿Cómo puedo enseñarle Zen si primero no vacía su taza?”.
Bruce Lee, siglos después, adoptó esta filosofía como el núcleo de su arte marcial, el Jeet Kune Do. Lee se dio cuenta de que muchos artistas marciales estaban atrapados en la “tradición”. Hacían formas (katas) rígidas porque “siempre se había hecho así”. Estaban llenos de “agua vieja”. Lee decía que para combatir de verdad, en la calle, donde no hay reglas ni árbitros, tenías que ser fluido como el agua. Tenías que estar dispuesto a tirar a la basura lo que habías aprendido si ya no funcionaba en la realidad. A esto se le llama Desaprender. Es mucho más difícil que aprender. Aprender es sumar. Es gratificante para el ego. “Mira cuánto sé, mira cuántos libros he leído”. Desaprender es restar. Es doloroso. “Lo que creía saber es inútil o falso”. Requiere una humildad radical y un coraje brutal. Alvin Toffler dijo: “Los analfabetos del siglo XXI no serán aquellos que no sepan leer y escribir, sino aquellos que no sepan aprender, desaprender y reaprender”.
La Lección:
Lo que te trajo hasta aquí no te llevará hasta allí. De hecho, lo que te trajo hasta aquí a menudo es lo que te impide llegar allí. Tus viejas herramientas se convierten en cadenas oxidadas.
- El Perfeccionismo: Te sirvió en la escuela para sacar buenas notas y agradar a los profesores. Ahora, como emprendedor, te paraliza porque necesitas velocidad de iteración, no perfección. Tienes que desaprender el perfeccionismo.
- La Agresividad: Te sirvió para sobrevivir en un barrio difícil o en una empresa tóxica. Ahora, en una relación de pareja sana, te está destruyendo la intimidad. Tienes que desaprender la defensa constante.
- El Trabajo Duro (fuerza bruta): Te sirvió cuando eras junior. Ahora que eres líder, si sigues haciéndolo todo tú, te quemarás y no dejarás crecer a tu equipo. Tienes que desaprender el “hacer” para aprender a “delegar”.
El maestro siempre mantiene un poco de espacio vacío en su taza. Nunca dice “ya lo sé todo”. Siempre dice “esto es lo que sé hasta ahora, pero podría estar equivocado mañana”. Esa duda metódica es su salvavidas. Si crees que ya tienes la respuesta final, dejas de buscar. Y si dejas de buscar, el mundo (que cambia siempre) te atropella. Vacía tu taza. Tira el té viejo y frío. Deja sitio para lo nuevo.
Reflexión Final:
- La Taza Llena: ¿Sobre qué tema tienes opiniones tan firmes que te niegas a escuchar argumentos contrarios? (Política, dieta, religión, negocios). Ahí es donde estás estancado.
- El Lastre: ¿Qué hábito o creencia antigua te está frenando hoy? ¿Qué “verdad” de tu pasado ya no es verdad en tu presente?
- La Práctica de Hoy: Identifica una creencia firme que tengas. Busca activamente un argumento en contra. Lee un artículo de “la otra parte”. Intenta entenderlo sin juzgar. Vacía un poco tu taza.